- La medida modifica la Ley de Control de Armas, estableciendo un aumento en las penas e incorporando la agravante por alterar la tranquilidad o infundir el temor en la población.
“Lo principal para nuestro Gobierno es la tranquilidad y la seguridad de las familias”, destacó el Intendente de la Región de Coquimbo, Pablo Herman, luego que el Presidente Sebastián Piñera promulgara la ley que sanciona como delito el uso, venta y fabricación de fuegos artificiales.
“Hay grupos que los utilizan para intimidar y cometer delitos. Por eso es que como Gobierno estamos avanzando con una nueva Ley que aumentará las penas a quienes posean o usen estos elementos. Lo que antes era considerado como una falta, hoy tendrá duras sanciones”, destacó el Intendente Herman.
La iniciativa modifica la ley de control de armas, que actualmente sanciona como falta, con pena de multa, estas acciones, estableciendo ahora como delito, con penas de presidio de hasta 3 años de presidio por el uso, venta y fabricación de fuegos artificiales.
A esto, se incorpora la agravante por alterar la tranquilidad o infundir el temor en la población. En este sentido, explicó el Intendente las penas de presidio serán de 3, 5 y hasta 10 años de cárcel.
“Con esta nueva Ley estamos diciendo alto al fuego, además, vamos a sancionar a quienes utilicen injustificadamente armas de fuego, alterando el orden público. Esto es una señal de que nuestro Gobierno seguirá preocupado por la seguridad de todos y castigando con rigor y firmeza todo acto o conducta que afecte a nuestras familias”, acotó la máxima autoridad regional.
La ley se suma a una serie de otras iniciativas impulsadas por el Gobierno para combatir la delincuencia y resguardar el orden público, como son los proyectos de ley de control de armas, de combate al narcotráfico y la reciente ingresada iniciativa contra el crimen organizado.
