El aporte de las universidades e institutos para frenar la pandemia

El aporte de las universidades e institutos para frenar la pandemia

Desde inicio de la pandemia del Covid-19, las universidades e institutos han tenido un rol activo en las estrategias que se han implementado para hacer frente al virus. Así, las casas de estudios, a través de sus distintas disciplinas que van desde la ingeniería, el diseño y el área de la salud se han coordinado para sumarse a las acciones que se están ejecutando tanto para frenar la curva del virus como para apoyar el trabajo de los funcionarios en la Región de Coquimbo.

Tanto los alumnos como los docentes, han trabajo en la elaboración de máscaras de protección, para los funcionarios que están en la primera línea; en la fabricación de ventilatorios mecánicos, para ayudar a enfrentar la segunda ola de casos covid-19; en la habilitación de laboratorios de biología molecular para analizar las muestras para la detección del virus; y en el apoyo al trabajo clínico a través de la atención de pacientes, además de apoyar el proceso de vacunación y trazabilidad de los casos. 

Fernando Díaz, vicerrector de la Universidad Pedro de Valdivia Sede La Serena, comenta que, en junio del año pasado, al dimensionar la magnitud de la emergencia sanitaria pusieron a disposición de la Región de Coquimbo su infraestructura, equipamiento y a todo el talento humano, que ellos poseen. “Tenemos una gran responsabilidad con la comunidad. Siempre hemos tratado de estar presente cuando nos necesitan. Por ello, cuando nos comentaron que requerían de un lugar para poder instalar el centro de trazabilidad regional, inmediatamente accedimos”, señaló.

Para fortalecer esta estrategia la universidad cedió cuatro laboratorios de computación y 20 salsas de estudios. “No dudamos en apoyar, porque sabemos lo fundamental que es esta labor para conocer la realidad del Coronavirus en nuestra región y así tomar las decisiones”, indicó el vicerrector de la Universidad Pedro de Valdivia Sede La Serena.

Este aporte fue muy valorado por la SEREMI de Salud, ya que permitió apoyar las estrategias de trazabilidad en la región. “Agradecer muy amablemente al vicerrector Fernando Díaz. Él amablemente cedió gran parte de la universidad para colocar este centro de trazabilidad, el cual ha sido un aporte muy importante para poder controlar la pandemia en nuestra región. Los trazadores están ocupando las dependencias que amablemente han sido facilitadas para esto y, vuelvo a repetir, ha sido uno de los factores muy importantes para mejorar y para controlar la pandemia en nuestra región, así que muchas gracias”, destacó el Seremi de Salud, Alejandro García.

Durante este año de pandemia, todas las entidades formadoras han realizado sus máximos esfuerzos por contribuir en diversos ámbitos a combatir en esta emergencia sanitaria y de esta manera acoger el llamado que realizó el intendente Pablo Herman, de trabajar todos juntos en pro del beneficio de las personas.

Ramiro Trucco, rector de las instituciones Santo Tomás de la Región de Coquimbo, explica que como corporación incentivaron a los alumnos para que fueran parte de este proceso y se sumaran al apoyo que le estaban brindando a los centros de salud.

“Desde un principio, tenemos alumnos apoyando el proceso de vacunación en La Serena, Coquimbo y Ovalle y también en la trazabilidad de los casos. Además, muchos de nuestros estudiantes retomaron sus prácticas e internados para colaborar y apoyar a los funcionarios de la salud, quienes llevan más de un año luchado contra el virus”, señaló el rector Trucco.

Si bien durante algunos meses fueron suspendidas las actividades académicas al interior de los hospitales por seguridad de los estudiantes, desde octubre del año pasado se permitió que los alumnos retornarán paulatinamente a realizar sus prácticas e internados bajo estrictos protocolos sanitarios y con la autorización y respaldo de sus casas de estudios. 

Es así, como desde enero a la fecha, más de 500 alumnos se encuentran realizando su internado en los hospitales de La Serena, Coquimbo y Ovalle. Siendo el mayor número de ellos de las universidades Católica del Norte, Tecnológica de Chile y Santo Tomás, además de los institutos IPChile y AIEP.

“Durante este año, hemos recibido el apoyo de diferentes universidades e institutos, para abordar la pandemia. Ha sido un trabajo colaborativo que nos ha permitido fortalecer algunas áreas estratégicas como son la trazabilidad, la vacunación y la atención de pacientes. El compromiso por el bienestar de la comunidad se ha visto reflejado en los estudiantes, quienes gracias al respaldo de sus casas de estudio se han sumado a la primera línea”, señaló el director del Servicio de Salud Coquimbo, Edgardo González.

Laboratorios universitarios

La reconversión de los laboratorios de investigación de las universidades La Serena y Católica del Norte, para sumarse a la red de diagnóstico nacional del Covid-19, permitieron aumentar la capacidad de análisis en la región, en uno de los momentos más críticos dada el alza de contagios.

Con la habilitación de los laboratorios FIGEMA-CEAZA-UCN, Cancerlab-UCN y Departamento Biología Universidad de La Serena se logró incrementar tanto la toma de exámenes de PCR y disminuir el tiempo de espera de sus resultados de los exámenes, al ser procesados dentro de la misma región.

Donación de ventiladores mecánicos y escudos faciales

El marco de la iniciativa “Un Respiro para Chile”, impulsado en conjunto con el Ministerio de Ciencia y el Banco Interamericano de Desarrollo, la Universidad Católica de Chile donó 4 ventiladores mecánico invasivo, para ayudar a enfrentar el segundo peak de casos covid-19, que se está viviendo en la región y que tiene un alto número de pacientes utilizando camas críticas.

Se trata de ventiladores de emergencia, rápidos y seguros desarrollado y producido en Ingeniería Mecánica y Metalúrgica UC, gracias al financiamiento de Corfo y de Sofofa Hub, y que fueron entregados a los hospitales de La Serena, Coquimbo, Ovalle e Illapel.

A esta donación, se suman los escudos faciales que confeccionaron los alumnos de ingeniería de la Universidad de La Serena, por iniciativa propia, como una deforma de apoyar a la protección de los funcionarios que se encuentran trabajando en la primera línea.