En agosto se realizará una reunión entre la Armada, la asociación gremial del recinto y Sernatur para normalizar las prestaciones que ofrece ese entorno, entre ellas observaciones de aves y fauna marina, paseos náuticos, pesca recreativa y buceo. En el lugar conviven hasta 150 trabajadores del mar, y el turismo se presenta como una oportunidad complementaria a sus ingresos normales.
Luego de una inspección realizada por Sernatur junto a la Armada, los pescadores de la caleta de Guayacán, en Coquimbo, iniciarán el proceso para formalizar y regularizar los servicios turísticos que ofrecen a los visitantes, entre ellos observaciones de flora y fauna, paseos náuticos, pesca recreativa y buceo recreativo.
“El objetivo de las inspecciones es formalizar las actividades de Turismo Aventura en la región, pero en este caso verificamos los permisos otorgados por la Armada, y que los prestadores se registren con Sernatur para seguir los procesos de inspección a estándares de seguridad”, dicen las inspectoras de Sernatur Jenny Muñoz y Daniella Cárdenas.
Cada una de las actividades deben quedar registradas, pero los requisitos básicos para inscribirse es contar con un permiso o una resolución entregado por la autoridad marítima, además de la cédula de identidad de la persona interesada o representante legal, y la carpeta tributaria que se consigue en el Servicio de Impuestos Internos, luego de la iniciación de actividades. Posteriormente, se deberá llenar una ficha general sobre los estándares de seguridad. En caso de constituir una sociedad, se debe contar con el extracto legal de ésta.
Orlando Rojas, pescador que facilita servicios en la emblemática caleta, sostiene que, al regularizarse, la actividad se realiza de forma profesional y atiende a los requerimientos de los turistas que buscan servicios registrados. “Honestamente, la gente viene y quiere hacer turismo, y me está faltando esa línea. Llevo años haciendo turismo en Guayacán y eso me ha llevado a certificarme a través de la autoridad marítima. La gente cree en mí y traslado gente de otros lugares a pasear”, agrega. Eulogio Fernández, otro pescador del lugar, añade que Guayacán es un diamante “en bruto”: “soy uno de los únicos que están haciendo turismo, las personas me buscan. Y aunque igual hay más embarcaciones, los pescadores no quieren hacer turismo porque es complejo y desconocen los procesos”.
Sectores de piratas, donde se estima que existen hundimiento de los galeones; recorridos por la bahía de La Herradura; observación de especies a 15 millas de la caleta; postales con una embarcación de alto tonelaje que llega al puerto de una empresa privada y visitas a las áreas de manejo son otros atractivos que estos pescadores desean integrar a la oferta para los visitantes.
Óscar Araya, presidente de la Asociación Gremial de Pescadores de Guayacán, reconoce que hacer turismo es una oportunidad para complementar actividades, debido a que “el pescador se quedó con la idea de la pesca y les cuesta innovar. El turismo se ve muy lejano porque no tienen la educación necesaria para hacerlo”.
En total, existen hasta 150 pescadores potenciales en Guayacán que podrían sumarse al rubro. Arnaldo Guinossi, alcalde de Mar en Guayacán, coincide que, si bien las prioridades están en otras actividades, el pescador ha aprendido a buscar nuevas alternativas, como la habilitación de un patio de comidas, tipo foods trucks, atendido por los mismos pescadores y sus familias, que promueve el consumo de productos gastronómicos en base a pescados y mariscos. “Solo faltan herramientas para capacitarlos en un buen servicio. Aquí tenemos gastronomía marina y una buena caleta donde prima el orden, la limpieza y la seguridad, porque hemos querido que el turista se sienta seguro”, añade.
Angélica Funes, directora de Sernatur Coquimbo, explica que adscribirse en el Registro Nacional de Prestadores de Servicios Turísticos permite identificar a los operadores formales y es un paso obligatorio a aquellos que ofrecen actividades de Turismo Aventura.
“En primer lugar otorga mayor seguridad a los turistas en cuanto al cumplimiento de los derechos de los consumidores y a su seguridad en la experiencia de viaje. También permite al prestador estar dentro de la oferta nacional de servicios turísticos; acceder a instrumentos de fomento y capacitación, además de ferias, talleres, eventos y todas las actividades realizadas por Sernatur”, sentencia.